Por qué la política esta tan desprestigiada, tan desgastada y con una imagen pésima sobre todas las demás acciones y actividades que el ser humano realiza en la vida?.

A propósito de que cada año hay procesos electorales en diferentes países, para elegir a nuevos senadores, diputados, alcaldes, regidores o concejales y para elegir a los presidentes y vicepresidentes de determinado país.

En nuestra América, no escapamos a esos procesos electorales con sus particularidades de los sistemas políticos y de representatividad o composición de las fuerzas electorales y de las organizaciones políticas.

El ciudadano elector, llámese votante, pueblo, masa popular, se le insta a elegir entre varias opciones de frentes electorales o de ideologías amparadas a pensamientos que se iniciaron hace más de 200 años y que cada vez se replantean con atractivas o no muy atractivas propuestas de gobernanza para cautivar el voto.

La política es el arte de gobernar, de educar, es servir con decoro en la administración de los bienes públicos, siempre se ha dicho que el político tiene que tener como norma vocación de servicio y espíritu de sacrificio. Entrar por la puerta grande y salir por la misma puerta con el orgullo del deber cumplido y del juramento que hizo al asumir su cargo (hombre o mujer) como alcalde, diputado, senador, vicepresidente o presidente de la Republica.

En los procesos electorales los lideres de los partidos políticos a falta de una propuesta bien elaborada y con raíces firmes para defenderlas como alternativas reales de un bienestar mejor para la población como un todo, se dedican a resaltar y buscar todos los defectos de sus adversarios, no combatir sus ideas, sus pensamientos, sus posiciones ideológicas o programáticas, el ataque es personal, grupal y con verdades o mentiras dejan en la mente de los ciudadanos que los políticos son malos, sinvergüenzas, van al gobierno no a servir , sino a servirse y este ataque que entre políticos se hacen terminan ensuciando la idea de la política.

Al día de hoy en cualesquier país de nuestra América la gente piensa que quien se mete en política es una persona que va con fines de hacer negocios, de robar, de hacer beneficios personales, de hacerse millonario. Ese es lo que la gente opina de todos los partidos políticos, no hay unos buenos y otros malos, la sensación de la población en su gran mayoría es que todo el que se mete a la política va con propósitos nada nobles, una razón de esto es que los mismos políticos se han encargado de ensuciar la idea de la política y han hecho creer al ciudadano que la política es una acción negativa, que solo se busca para el aprovechamiento y enriquecimiento.

Cuando los políticos comprendan que la política es un acto de honor y que quien se mete en ella es para dignificarla y darle con sus actos un valor humano para el bienestar social, económico, productivo, cultural y laboral de la población, cuando eso suceda se le devolverá el sitio de importancia que debe tener la política.

José Antonio Arce Jiménez
Editor – Revista Líderes Globales